Los desafíos que enfrentará el presidente electo
La administración del presidente electo, Guillermo Lasso, comenzará sus funciones en el Palacio de Carondelet a partir del lunes 24 de mayo y a lo largo de su gestión, enfrentará distintos desafíos como mantener las alianzas políticas dentro de la Asamblea Nacional, donde su partido político CREO, obtuvo apenas 12 curules en las elecciones generales.
Lasso, que acumuló un total de 4.6 millones de votos en la segunda vuelta, promete 9 millones de ecuatorianos vacunados contra el COVID-19 en los primeros 100 días, crear 2 millones de empleos atrayendo la inversión extranjera y subir el salario básico unificado a $500 durante los próximos 4 años, proyectos que no serán fáciles de cumplir.
Tras obtener en la primera vuelta apenas 1.9 millones de votos, Lasso ganó las elecciones el pasado 11 de abril debido al giro 360 que le dió a su campaña política, prometiendo en su plan de gobierno, reformas sociales y económicas que beneficiarían a las mujeres, a la naturaleza, a los deportistas y a los grupos LGBTI.
¿Cómo Lasso va a vacunar a 9 millones de ecuatorianos?
El plan de vacunación de Lasso se enfocará en inmunizar a 90,000 personas por día en 2,100 centros de salud pública a nivel nacional. Esta operación será liderada por la Ministra de Salud entrante, Ximena Garzón, Doctora en Medicina con PHD en Salud Pública que se ha desempeñado como Directora de la Maestría de Salud Pública de la UDLA y como Directora del Posgrado de Medicina del Trabajo de la UDLA.
En una entrevista con La Posta, Lasso anunció que ha estado en conversaciones con el presidente chino Xi Jinping y el presidente ruso Vladimir Putin para la adquisición de vacunas.
Cabe recalcar que el actual gobierno ha dejado contratos con diferentes farmacéuticas para recibir 18 millones de dosis adicionales a las 2 millones que se encuentran en el país. En la página web del Plan Vacunarse se detalla, mediante un cronograma, la llegada de las vacunas restantes.
Las alianzas con el poder legislativo serán necesarias
La nueva Asamblea Nacional, que comenzará sus funciones el 14 de mayo, está compuesta por 137 diputados de 12 partidos políticos y 3 asambleístas provinciales. El movimiento CREO, del presidente electo, apenas obtuvo 12 diputados mientras que UNES, el partido correista, ganó 48 puestos.
La mayoría de los escaños fueron hacía partidos políticos de oposición como Izquierda Democrática y el Movimiento Pachakutik convirtiéndose en los grupos más poderosos en la nueva asamblea después de la alianza Unión por la Esperanza que patrocinaba la campaña electoral de Andres Arauz.
Un presidente no puede gobernar sin mayoría en el congreso, por lo que Lasso tendrá que crear alianzas estratégicas para lograr proyectos de ley y reformas. El único apoyo que Lasso tiene asegurado es el de los 12 puestos que ganó su movimiento político y los 18 del Partido Social Cristiano.
